Argumento: El filme presenta la historia de dos niños mineros que trabajan en el interior del Cerro Rico, en el Potosí boliviano, dentro de galerías mineras que datan de los inicios del periodo colonial español, en el siglo XVI. Los mineros, que son en general devotos católicos, tienen la ancestral creencia de que el diablo, representado por cientos de estatuas construidas en los túneles, determina el destino de todos los que trabajan en las minas.